Divisadero

Aretha ha colaborado con el Estudio de Interiorismo de María Díaz Leguina en el equipamiento de las diferentes plantas de la sede de este cliente junto al Parque del Retiro madrileño.

María Diaz Leguina trata con especial mimo cada uno de sus proyectos, que abarcan tanto el aspecto residencial como el de espacios de trabajo, siempre con un toque personal singular que pretende hacer habitables y amables los entornos en los que trabajo. María nos describe el motivo de su intervención, que supuso una reforma integral en las 3 plantas del edificio destinadas a su cliente.

Oficina situada en la calle Menorca prácticamente esquina con El Retiro. El cliente estaba buscando una oficina dónde pudiera disponer de flexibilidad en su forma de trabajar, es una empresa dónde están muy preocupados por conservar el talento, el perfil de los trabajadores es joven, necesitaban disponer de una oficina muy agradable, con luz, céntrica, dónde la gente quiera trabajar y dónde la comunicación y las ideas fluyan. Al mismo tiempo, el cliente se preocupa mucho porque las personas trabajen a gusto, sin ruido y se puedan disponer de privacidad al hablar con sus clientes de las estrategias que están llevando a cabo, su forma de trabajo es muy dinámica tanto de forma individual a través del teléfono con el cliente, como pequeñas reuniones y se preocupan por realizar formaciones para sus trabajadores, como disponer de un espacio dónde se podrían hacer reuniones de trabajo distendidas tomando algo o en equipo con espacios de grupo con aspecto desenfadado.

Cuando inicié este proyecto el cliente, tenía especial interés en mejorar el ruido ambiental dentro del centro de trabajo, pues empezaba a ser un problema para los espacios abiertos y además quería introducir el concepto phonebox para poder disponer de pequeñas reuniones privadas por teléfono. El partner adecuado para llevar este proyecto era sin duda Aretha, especializado en acústica y dónde el cliente podía observar el funcionamiento de los distintos materiales. En la distribución planteadas se situaron mesas operativas con separadores acústicos de fieltro y una serie de salas de reuniones con doble cristal para aislar del ruido y se construyeron una serie de phone boxes. La idea de estas pequeñas cabinas para hablar por teléfono era que estuvieran aislados pues ahí el cliente tenía reuniones de teléfono con los clientes, se aislaron completamente, techo, paredes y con fieltro además se añadieron paneles acústicos en pared y techo para la reverberación.

El cliente está muy satisfecho con el resultado final del proyecto, porque se ha logrado conseguir espacios abiertos de trabajo, acústicamente agradables, salas de reuniones con privacidad y phoneboxes de diversos tamaños para lograr esa privacidad necesaria en su forma de trabajar.

Por otro lado, se realizó una sala de juntas con una grada para disponer de un espacio polivalente y junto con la cafetería de la oficina para poder utilizar ambos espacios de manera conjunta pero aislados del resto de las plantas.

Para nosotros como Aretha ha resultado una satisfacción poder colaborar tan estrecha con María en la búsqueda de soluciones eficientes en lo referido a la acústica, la estética y la sostenibilidad. Especialmente importante fue la participación en el estudio acústico tanto de acondicionamiento como de aislamiento acústico en las zonas más sensibles para el cliente, y en la aportación de las soluciones adecuadas para lograr el adecuado confort, con un resultado sobresaliente.