Las oficinas siguen modas
2 min. Lec
Nuestro entorno y día a día cambian a un ritmo sin precedentes. Somos testigos de la continua aceleración en todos los sectores y de cómo lo tradicionalmente aprendido deja de tener vigencia para dejar de ser lo que era en esencia y transformarse, un continuo trampantojo a todos los niveles.
No hay un solo tipo de lugar de trabajo en el futuro ni en el presente inmediato. Seguirán existiendo oficinas para dos personas con sus maceteros de autorriego y el tradicional escritorio, así como oficinas 100% virtuales sin espacio físico tangible. Entre un modelo y otro hay un amplio abanico de opciones y adaptaciones.
Pero si nos concentramos en el entorno de trabajo: Es única la energía que surge cuando todo el equipo en un espacio físico se sienta y reflexiona sobre una idea, oyes a tu compañero suspirar, el cliente al que tienes oportunidad de ver cara a cara lanza un chiste y la tensión se desvanece o todos sonreímos por un resultado conjunto. Es una energía que se puede escuchar, ver y sentir y esta energía se da en un espacio tangible.
Cuando hablamos de oficinas hablamos de personas, de colectivos que aglutinan en muchos casos hasta 4 generaciones diferentes, a las que hay que integrar en un espacio físico y promover el conocimiento, ese espacio es a su vez la mejor manifestación física de la organización a la que pertenecen. Por lo que tiene sentido modelar entornos que integran la dimensión emocional, digital y física de personas, asegurando un bienestar sostenible y salvaguardando e impulsando una red de talento.
Cada organización modela los espacios en función de lo que quiere mostrar o como quiere hacerse visible, pero lo que parece claro es que todos los esfuerzos irán encaminados a crear espacios colectivos para sus usuarios, donde se vinculen conocimientos y experiencias y es de esta forma colectiva que harán crecer su relevancia en el mercado.
Los espacios colectivos marcan el ritmo de las nuevas oficinas. Por un lado, tenemos zonas de circulación o estanciales de carácter puntual, como pueden ser vestíbulos, zonas de paso o cantinas, donde se fomentan encuentros aleatorios y espontáneos que nos conectan y ayudan a construir relaciones fuera del equipo inmediato reforzando el sentido de comunidad.
Un vestíbulo de acceso es un punto compartido por el 100% de la empresa y donde la probabilidad de coincidir una vez al día con el 80% de tus compañeros es alta, así que automáticamente se trasforma en un punto asegurado de interacción entre personas y, por lo tanto, una experiencia a ser diseñada y activada.
Por otro lado, existen áreas de trabajo colectivo como salas de proyectos, showroom, taller de co-creación que brinda espacio para el desarrollo de procesos creativos, en donde se va a trabajar un determinado tema y en él los equipos comparten sus conocimientos y construyen soluciones.
En general nos encontramos con espacios creados para fomentar e impulsar las relaciones entre personas, la comunicación y la colaboración. Venimos de experimentar una digitalización a marchas forzadas voluntaria o involuntaria, pero finalmente adquirida y en constante evolución, sumada a su vez al redescubrimiento del hogar y la posibilidad de trabajar en remoto.
Actualmente buscamos el equilibrio entre las distintas modalidades de formas de trabajo, pero a su vez reflexionamos y redescubrimos el valor de aquello que hacíamos en el pasado en nuestra rutina diaria.
Recuperar un recorrido en metro donde tengo tiempo para leer un artículo, aprender, escuchar una entrevista, ese tiempo también es valioso y beneficioso. Al igual que tomar un simple café antes de entrar a la oficina activando así el entorno del lugar de trabajo.
Los espacios de oficinas pasan a ser oportunidades claras de creación y diseño de ecosistemas ofreciendo experiencias y estímulos únicos que inspiran y nutren los sentidos, son adaptables, polivalentes y buscan responder a este concepto híbrido en el que nos movemos en la actualidad, donde los limites se desdibujan y lo virtual y lo físico se entremezclan.
Comparte esta publicación